He descubierto la belleza de una flor... Una hermosa Azucena...

A pesar de la misera que ronda nuestras vidas, deberiamos tomarnos un respiro, sentarnos bajo la sombra de un árbol y esperar una sorpresa cuando menos lo imaginemos...



ME ENAMORE DE UNA FLOR
Me encontré vagando en los oscuros senderos de los recuerdos de mi pasado, buscando refugio por tantos fracasos. Cansado, mi corazón solo quería dejar de latir y descansar por siempre. Con mis ojos pesados cada roca en mi camino me invitada a recostarme sobre ella por mas incomoda que esta fuera pero fue hasta oscurecer el cielo que con dificultad encontré un árbol en penumbras, trate de apoyarme en el para reposar… Aquella fue noche antes de luna llena, en la que entre lágrimas y sollozos fue que quede dormido… Esa lúgubre noche tuve malos sueños por horas que me obligaban a abrir los ojos para escapar de mi ilusión, hasta que finalmente me dejaron en paz y logre descansar un poco.

Al día siguiente, me despertó el ligero toque del roció matinal sobre mi piel, la sombra que aquel árbol apenas cubría mi rostro, entonces me percate, una pequeña flor cerca de mi mano, acerque mi vista para apreciarla mejor, simplemente hermosa, única. Su belleza era enigmática, mágica, mística… Me quede observándola por varios minutos, sus pétalos tenia una mezcla de colores claros que se desvanecían al llegar a los bordes de estos, quise tocarlos pero por temor a romperlos preferí solo admirarlos…

Quede todo ese día y tarde junto a esa flor, no me importo la sed ni el hambre ni mucho menos el dolor que creaba miseria en mi interior, solo me importaba esa flor. Maravillado con su belleza me quede dormido tan solo al caer el atardecer. En mi sueño todo fue distinto, estaba yo junto a esa flor, un destello cegó mis ojos por un momento y en una mujer la flor se convirtió, ella era tan bella como la flor, incluso me atrevo a decir que era mucho mas hermosa, no recuerdo el sonido de si voz, sin embargo recuerdo a la perfección la sensación de tenerla en mis brazos y besarla. Nuestras manos juntas caminando en ese Edén, su sonrisa, su figura, sus ojos en los que me vi reflejado lleno de paz, un sueño perfecto… Un día perfecto…

Desperté a media noche maldiciendo mi existencia por saber que solo había sido un sueño, de inmediato gire mi cabeza y ahí estaba ella, bañándose con la luz de la luna, la calma regreso de golpe a mi ser, esa noche converse con aquella flor como en mi sueño, como con esa hermosa mujer, fue el desvelo mas agradable que había tenido continúe así hasta volver a ver el sol del horizonte. Me sentía diferente, con calma en mi corazón, quise tomar la flor y llevarla conmigo tal vez mi cuerpo no soportaría el resto del viaje y me hubiera gustado morir imaginando que lo hago en sus brazos, seria una muerte perfecta y hermosa. Pero decidí dejarla en ese lugar, yo no era nadie para decidir el hogar de aquella flor. Con una lagrima que cayo de mi mejilla moje uno de sus delicados pétalos y con una mirada perdida me aleje del lugar con una promesa… Fuera cual fuera mi destino jure que regresaría a su lado en esta vida o en la otra…

Tiempo después, me entere de que aquella flor era una Azucena, pero jamás volví a ver una igual a ella, aun tengo esos recuerdos frescos en mi memoria, solo espero volver a ver aquella flor que se hizo mujer tan solo para hacerme feliz y protegerme de mis temores, aquella que se hizo mujer tan solo para enamorarme…

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Esta pequeña historia es el ragalo para mi amada Azucena, espero que hayas tenido un buen dia preciosa... Mucha felcidades corazón ♥

**ILY**