Solo… Otra ves solo…

El amor pone juntos una mezcla de ilusiones, sueños y sentimientos… Todo ello en conjunto forma un mundo nuevo, una dimensión nueva, donde solo aquellos que comparte esos tesoros pueden habitar… Pero que pasa ¿cuando todo pierde su brillo, cuando el amor se acaba? ¿Quién debe heredar esa tierra nueva? En mi caso… Soy yo quien ha quedado solo en esta tierra ahora desértica. Y no tengo mas remedio que destruirla con todos sus recuerdos y dejar que el demonio en mi interior reine otra vez…



DE RIOS DE SANGRE Y TIERRA NEGRA…
Nubes oscuras y densas poblando el cielo gris.
Noches sin luz, sin brillo. Sin amor…
Desolado nuestro mundo busca su perdición.
Nuestros sentimientos se han marchitado…
Nuestra dimensión ya no tiene porque existir…

Aquellas noches en vela, en las que hacíamos
el amor con tanta pasión y lujuria han quedado
en el olvido, esa energía era la energía vital de
nuestro universo y sin ella ya no queda nada.
Ya no hay nada…

Las criaturas de nuestros sueños a muertos en mis
brazos. La lluvia derrite la flora que juntos imaginamos…
Y el fulgor de mi soledad, opaca la lucidez de aquella luna
testigo de nuestra unión, pero que ahora esa luna cae en
pedazos sobre mis manos al no tener nada por lo que vivir.

Mil tormentas azotan nuestros sueños, millones de incendios
destrozan nuestras ilusiones… Pero tan solo unas pocas
palabras terminaron con nuestro amor… Ahora solo estoy yo
esperando a que todo termine por mi propia voluntad.
Y así será…

Ya no falta mucho, la tierra oscurece y los ríos se tiñan de
rojo, el cielo es gris, no hay luna… No hay nada.
Solo silencio, oscuridad y soledad…
Todo ha muerto a manos mías…
Y el demonio ha vuelto a salir… Ha vuelto a reinar…

Fuego, muerte, destrucción, soledad y agonía…
Todo provocado por un mente maldita… La mía…
Y aunque he vuelto a quedar solo, lo hare reinando…
Reinando con locura maldita, en esta tierra…

De ríos de sangre y tierra negra…